

Nos acercamos virtualmente a Los Ángeles para descubrir uno de los últimos edificios que se incorporaron al nuevo plan de regeneración del centro urbano de la ciudad: el museo The Broad. Analizamos su impresionante fachada y su sostenibilidad. ¡Sigue leyendo!
Ubicado en el solar adyacente del Walt Disney Concert Hall proyectado por Frank O. Gehry, The Broad incorpora una nueva escena a la regeneración cultural de la Grand Avenue, en el Distrito Centro de Los Ángeles. El museo alberga la colección de arte de la Broad Art Foundation, que cuenta en su mayoría con obras de arte contemporáneas a partir de la Postguerra. El edificio tiene una superficie construida total de 12000 m2 y fue inaugurado en septiembre de 2015.
Los arquitectos Diller Scofidio + Renfro presentaron su propuesta de proyecto con el concepto «the veil and the vault» (el velo y la bóveda en español). El edificio consiste por tanto en un diálogo entre lo liviano y lo estructural: la hoquedad masiva que alberga los espacios de museo, oficinas y aparcamiento sobre la que se posa un «paño tridimensional» poroso patronado.
Con esta idea se pretende dar respuesta formal tanto a las necesidades programáticas del museo, como «arca» masiva que guarda en sus hoquedades interiores las colecciones de arte, así como a la escala urbana que tiene el entorno de Los Ángeles.
La verdad es que sorprende la respuesta formal de la solución del «velo», ya que en el entorno urbano próximo se encuentran los principales rascacielos del nuevo centro de los Ángeles y también el famoso Walt Disney Concert Hall, la catedral de Nuestra señora de los Ángeles proyectada por Rafael Moneo y el Ayuntamiento de la ciudad. Parece que, ante tanta monumentalidad, el edificio de The Broad quiere acercarse al suelo y el peatón con la textura perforada de su fachada. Da la sensación de que, en lugar de jugar con el cielo, el edificio The Broad es introvertido y humano en la ciudad:
La fachada está compuesta de piezas prefabricadas de hormigón soportadas por una subestructura de acero. Estas fachadas y techos porosos romboidales proporcionan una luz difusa que inunda los espacios expositivos:
La única excepción que ocurre en la fachada es en la sala de conferencias, donde «el velo» quiere meterse en el edificio, creando así un óculo que se ve desde el exterior:
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Además de destacar por su estética fachada porosa, el museo The Broad cuenta con la Certificación LEED Oro Nueva Construcción. The Broad destaca en las siguientes categorías: