

Ya que el CTE nos muestra la normativa del buen hacer en la construcción, en el blog del Reto KÖMMERLING nos gusta seguir haciéndote hincapié en la Eficiencia Energética y el confort. Hoy en día existen todo tipo de soluciones de aislamiento, con el fin de lograr además edificios saludables. Te mostramos cuáles son las mejores formas de aislamiento para techos y buhardillas, desde el punto de vista tanto térmico como acústico.
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Aunque no lo veamos, la entrada y salida de calor en los edificios se siente, sobre todo cuando estos no están aislados térmicamente. Lo mismo sucede cuando no están aislados adecuadamente a ruidos exteriores aéreos y de impacto. El aislamiento de techos y cubiertas cobra especial importancia desde el punto de vista térmico. ¿Quién no habrá estado alguna vez en la situación de estar en un ático maravillosamente decorado, pero con el aire acondicionado puesto todo el día en verano debido al calor sofocante? Esto sucede porque:
El aislamiento térmico es la capacidad de los materiales para oponerse al paso del calor por conducción. Desde el punto de vista normativo, el CTE 2019 marca claramente las exigencias mínimas de aislamiento térmico en la sección DB HE1. En el caso de las buhardillas no habitables, por lo tanto:
Observa bien que la transmitancia térmica límite y, por tanto, el nivel de aislamiento, depende claramente de la localización del edificio.
Lo principal en el aislamiento térmico es que, en la ejecución, no deben quedar huecos sin aislar. Eso significaría que el calor tendría posibilidad de seguir escapándose y no cumplir con la función aislante del conjunto.
El aislamiento acústico de techos es más complejo que el aislamiento térmico. La acústica arquitectónica en realidad precisa un cálculo técnico exhaustivo y particular de cada caso. La clave en general consiste en combinar materiales de diferentes densidades que vayan absorbiendo las diferentes longitudes de onda del ruido.
En cuanto al caso concreto del aislamiento acústico en techos, basándote como te hemos dicho en las indicaciones de los estudios acústicos concretos que realicen para tu caso, deberás incorporar seguramente estos 5 tipos de material:
En el caso de que te enfrentes a una reforma de piso, debes ser consciente de lo incómodo que resulta, por ejemplo, el estar tranquilamente en casa y de repente oír los pasos de tu vecino de arriba. Los techos de forjado deben aislarse, sobretodo desde el punto de vista del aislamiento acústico. El documento básico CTE HR tiene una guía con pautas sobre el aislamiento acústico. Si bien lo que debería hacerse es aislar el suelo del vecino de arriba para el ruido de impacto, los siguientes sistemas de techo mejoran notablemente la absorción de éste si se acompañan de amortiguadores acústicos:
Para absorber los ruidos de impacto en la vivienda te recomendamos que optes por los sistemas de falso techo suspendido, a base aplacado doble de yeso laminado (entre ambas placas poner una membrana bituminosa amortiguadora) fijados a una subestructura metálica anclada al techo. En la cámara de la estructura debes colocar el material absorbente acústico. Te recomendamos las mantas o placas semirrígidas de:
Otra opción muy recurrida, sobre todo en oficinas y lugares de concurrencia pública, es la instalación de paneles, bafles o islas fonoabsorbentes.
Si lo que tienes es una buhardilla sin aislar, existen distintas soluciones técnicas a la hora de elegir el formato del material aislante. Ya sabes que la buhardilla es el primer lugar que hay que aislar para notar diferencias en cuanto al confort térmico. En este sentido, actúas principalmente desde el punto de vista del aislamiento térmico de techos. Tienes por ejemplo: