

La construcción es una actividad de alto grado de multidisciplinariedad. Un edificio cumple muchas funciones que delega en diferentes elementos, construidos con diferentes técnicas y, obviamente, distintos materiales. Las diferentes cualidades de los materiales los hacen necesariamente óptimos para su uso en distintos ámbitos y para fines variables, hasta el punto de que un nuevo material puede llegar a cambiar la forma de proyectar y construir. Hagamos un repaso por las características de los plásticos y el servicio que pueden llegar a prestar:
Vivimos el siglo en que el ahorro y la innovación se combinan para situar nuevas metas. Queremos edificios cada vez más sólidos pero más livianos, con mayor confort interior pero más rápidos de construir y que sea posible desmontar. Para alcanzar todo esto hay materiales más propicios que otros.
· Ligereza y estética: Los materiales plásticos ofrecen toda una gama de durezas y resistencias, texturas y transparencias, y tienen en común un peso casi despreciable en comparación con otros. Si se aplica cada material a la función que le corresponde por sus características, la solución óptima se alcanza mediante la adición de capas a un cerramiento, que cuanto más ligeras sean, mejor. Es el cambio de paradigma de la ley de masas a la fachada ligera.
· Prefabricación y montaje en seco: También acorde del concepto de fachada ligera, favorecido por los nuevos materiales como los plásticos, los metales, los vidrios y el desarrollo de los aislamientos. La rapidez y la reversabilidad en el proceso de la construcción han de apoyarse necesariamente en la transferencia de trabajos al taller y la puesta en obra con la menor cantidad de aglomerantes húmedos posible.
· Comportamiento frente a agentes atmosféricos: una ventaja de los plásticos es la posibilidad de variar sus características mediante la modificación de la fórmula para optimizar su comportamiento en determinadas situaciones. Uno de los tipos de plástico más desarrollados para uso exterior es el PVC de las carpinterías de ventana por su largo recorrido dentro del mercado (especialmente en Alemania). Los cambios en su composición han terminado por reducir considerablemente las emisiones tóxicas durante su producción mediante la eliminación de materiales pesados. Además, se han alcanzado niveles de estabilidad dimensional que convierten estas carpinterías en las de mayor hermeticidad y se han superado los problemas de pérdida de color de los perfiles originales. Este material tiene por tanto un comportamiento frente a agentes atmosféricos que supera a los de la competencia.