

Es un símbolo de Brutalismo y Metabolismo Japonés. Construido en el año 1976 por los arquitectos franceses Michel Andrault, Pierre Parat, Aydin Guvan y Alain Capieu destaca su diseño por la yuxtaposición de cubos de cristal en un entramado de vigas y pilares de hormigón. Aun siendo un edificio de gran escala, su estructura permite flexibidad y la sensación de poder seguir creciendo.