

Los Edificios de Energía Casi Nula son el plan de la Unión Europea para reducir drásticamente el consumo de energía y las emisiones de CO2 en el sector de la edificación.
Sabemos que un EECN es un edificio que prácticamente no necesita nada de energía de la red. Para ello, hacen falta dos cosas:
De esta manera, necesita tan poco que lo que capta o produce es suficiente para que el edificio sea autónomo energéticamente, es decir, que sea de Consumo de Energía Nulo o Casi Nulo.
Según directivas de la UE de los últimos años, todos los edificios nuevos construidos a partir de 2020 deberán ser de Energía Casi Nula y para los que sean de la Administración, a partir de 2018. Sin embargo, aún no ha publicado nada acerca de los requisitos oficiales que tendrán estas construcciones.
Por su parte, el Departamento de Energía de Estados Unidos elaboró un informe con una aproximación de lo que un EECN debería ser. Lee nuestro resumen.
¿Entonces es lo mismo que PassivHaus?¿En qué se diferencian?
No son lo mismo, aunque sí van muy alineados. Mientras un Edificio de Energía Casi Nula intenta no consumir energía externa a la que produce, PassivHaus sólo busca demandar la menor cantidad de energía posible. Es decir, de los dos requisitos que mencionamos arriba, PassivHaus tradicionalmente sólo ha exigido el primero: que la construcción sea estanca y aislante hasta casi no necesitar energía.
Sin embargo, en 2015 PassivHaus, dio un paso adelante incorporando dos categorías nuevas dentro de su certificación para los edificios que quieren ir más allá de la reducida demanda. Las PassivHaus Plus y PassivHaus Premium se otorgarán a aquellas construcciones que, además de cumplir las exigencias originales, tengan una determinada parte de energía proveniente de fuentes renovables. Todo está explicado en el artículo PassivHaus adelanta a los EECN.
Para saber más, apúntate al Congreso de Edificios de Energía Casi Nula que se celebra en junio en Madrid. ¡Nosotros estaremos allí!