Los niveles de contaminación de Pekín son tan perjudiciales para la salud que lo comparan con «fumar varias cajetillas de tabaco diarias». Un artista de Shenzen quiere mostrarlo al mundo y a sus compatriotas de una manera muy visual.
«Nut Brother» ha salido a la calle con una aspiradora 4 horas diarias durante 100 días con una aspiradora y con lo que ha obtenido del aire ha fabricado un ladrillo. Ha mezclado las partículas de polución con arcilla y lo ha llevado a una fábrica de ladrillos para que lo procesen.
Después de un tiempo viviendo en Pekín, el artista decidió que tenía que enseñar a sus vecinos a pensar de una manera diferente en la protección del medio ambiente y a entender la relación entre el ser humano y la naturaleza.
El impacto mediático en China está siendo enorme, aunque hay quien duda de la veracidad de la historia. Nut se ha defendido diciendo que en los cien días obtuvo unos 100 gramos de «producto», y que dado que el ladrillo pesará mucho más es evidente que no es un ladrillo de smog, pero que la intención es simplemente simbólica.
No es el primer caso de materialización del smog que vemos: estas torres pensadas para purificar el aire de las ciudades acumulaban las partículas que luego se convertían en bisutería.
El artista quiere que el ladrillo se integre en la construcción de un edificio en Pekín, perdiéndose en la jungla de cemento como estaba anteriormente, una gota de agua en el océano.
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Fuente imágenes: quartz
