

El edificio más alto y más grande certificado por Passive House se ha empezado a construir el mes pasado y será una residencia universitaria.
Situado en Roosevelt Island medirá 82 metros de altura y albergará 530 estudiantes en 25.000 m².
La envolvente será estanca, con el mínimo número de juntas gracias al alto nivel de prefabricación: incluso las ventanas serán montadas dentro de los paneles de cerramiento en el taller. De esta manera, además, se abaratan los costes y se reduce el tiempo de construcción.
Los muros tendrán un espesor de 38 cm y triple acristalamiento en las ventanas. El presupuesto era ajustado, por lo que se ha limitado la cantidad de vidrio, dejando fuera del diseño de los apartamentos los grandes ventanales típicos de las casas pasivas y reservándolos para las zonas comunes.
La dirección del campus quiere crear un modelo asequible para los estudiantes, a la vez que innovador y comprometido. «El coste de los vidrios ha hecho preciso ajustarse en las dimensiones de los mismos, en relación con la forma en que se usan en este tipo de edificios sostenibles en Europa«, declara un miembro.
Por supuesto, la universidad esta muy interesada en este proyecto por la promesa de la reducción del consumo energético a una cuarta parte del convencional. Pretenden hacer todos los usuarios partícipes de este cambio de vida: «Lo que realmente intentamos no es cambiar el diseño, sino cambiar el comportamiento y concepción de la gente sobre este tema.»
Fuente: New York Times