

En la actualidad existe un abanico bastante amplio a la hora de enfocar una construcción, pudiendo elegir entre pautas sostenibles, pasivas, arquitectura bioclimática…etc. La elección dependerá del tipo de proyecto que queramos realizar, si buscamos obtener algún tipo de certificación, dónde queremos poner el foco, etc. También existe la posibilidad de combinar varios tipos de arquitectura, pudiendo realizar un proyecto bioclimático y sostenible a la vez.
En esta ocasión vamos a hablar de la arquitectura bioclimática, que es aquella que se diseña teniendo en cuenta las condiciones climáticas, reduciendo así el consumo energético y el impacto medioambiental.
La peculiaridad de los proyectos bioclimáticos es que no siempre siguen el mismo esquema constructivo, ni existen unos requisitos mínimos que deban alcanzarse. Al realizar una construcción bajo pautas bioclimáticas se estudiarán las condiciones climáticas de esa zona geográfica, y en función de ello se realizará un diseño u otro.
El diseño del proyecto debe estar orientado a unos objetivos (en términos de eficiencia), aunque sabiendo lidiar con las condiciones climáticas del lugar. Por ejemplo, si realizamos una fachada acristalada y orientada hacia el sur, obtendremos mayores ganancias de calor; y si es opaca y la orientamos al norte, evitaremos las pérdidas de calor.
Lo mismo pasa con las ventanas, según hacia dónde las orientemos obtendremos una mayor incidencia solar. Si este aprovechamiento del sol lo equilibramos con cerramientos aislantes y con elevados niveles de estanqueidad, reduciremos notablemente el consumo en calefacción.
Otros aspectos que hay que tener en cuenta en la arquitectura bioclimática es el viento o la vegetación. Debemos diseñar pensando en aprovechar la brisa en verano, pero protegiéndonos de las fuertes rachas de viento en invierno. Aquí la vegetación puede ser de gran utilidad, ya que puede proteger a la vivienda del viento invernal y dar sombra en verano.
La creación de “invernaderos” o el hecho de semienterrar una parte del edificio son otras técnicas de la arquitectura bioclimática.
Al construir bajo pautas bioclimáticas podemos destacar sobre todo tres ventajas:
Al final, la arquitectura bioclimática no es otra cosa que construir aprovechando las condiciones naturales y climática de una zona. Un ejemplo de ello es el Hotel ecológico Terra Bonansa, del que os hablamos hace poco.